Ser diferentes

Es la psicometría la disciplina que nos ayuda a medir y cuantificar todas las variables psicológicas, para saber quiénes son los mejores y más eficientes seres humanos, los más sobresalientes, los idóneos, los que todos lo saben, los perfeccionistas, los que continuamente viven creando; en sí , son los innovadores, creadores y pensadores muy diferentes al común de la humanidad.

De por si, estos jóvenes genios, o con habilidades especiales; son muy diferentes, díscolos, aburridos; nunca se encuentran consigo mismo, ni con los demás seres que los rodean; siempre van más adelantados, en sus estudios y en sus trabajos, y en sus vidas son muy diferentes, que los demás.

Se pretende creer a priori, que la practica hace al maestro; podemos inferir, que cualquier persona puede convertirse en un dominador de una disciplina, siempre que tenga disciplina, se esfuerce, persevere y viva concentrado en su proyecto.

La gran gracia que podemos hacer, por un gran genio potencial, es ayudarlos, acompañarlos; contribuir en su potencial inminente y jamás desconocer ese cumulo de habilidades, que se aprecia con facilidad, que es diferente a los demás.

La gran valoración y soporte de los analistas, académicos e investigadores, es que el baremun del coeficiente académico es superior a todos los demás; es una condición irrefutable y de valoración universal.

La motivación es una constante de valoración superior e impulsadora a tener vivencias nuevas; hacen de los suyos, una gran potenciación superior; para sentirse, pensar y actuar diferentes….

Asimilar, constantemente de los nuevos retos, los nuevos impulsos, sus nuevas ambiciones intelectuales; para desarrollar sus grandes habilidades. Jamás se debe pensar inducirlos a ser personas que no son, proveerlos siempre en lo que son.

No desatender su precocidad o curiosidad por lo nuevo, por su talante, por su acuciosidad, por hacerse notar siempre como seres de otra latitud; de por sí, su curiosidad es la gran esencia del saber.

La mejoría en todos sus actos son implícitos y cooperamos con su aprender a aprender continuamente, más que los propios resultados que pretendan lograr; de por sí, se reacciona a acciones diferentes, estimulantes desde la infancia en la casa con sus padres, quienes deberán estar promoviendo ideales nuevos; es la imperturbable constante.

No importa que se fracase en el desarrollo de una tarea específica, del hacer o del actuar; a veces los hierros y equivocaciones, es una condición sin ecua un de reaprender y mejorar, de crecer,; aprenderemos a valorar y resolver los problemas específicos a encontrar la mejor solución y seguir adelante con su propuestas…

La constante universal es no aceptar la derrota, ni dejarnos llevar por  el facilismo o, a etiquetas equivocadas; siempre estimular, facilitar e inducir, a su búsqueda de encontrar y sentirse satisfechos por lo que van logrando, como un gran acto positivo… de valoración continua….

Valorar su autoestima, reprogramar, proponer los nuevos retos en ese nuevo saber, reordenar su mente, desarrollar sus acciones a su propio aire, permitiendo la planificación sistémica, de querer reacomodarse al nuevo potencial humano y  personal y permanentemente evaluarse… y reprogramarse hacia nuevos logros…